Por : Domingo Caba Ramos
a) El 27 de febrero de 1844 – Se proclama, no se logra, la
Independencia Nacional; pero los haitianos no se dan por vencidos, pues
entienden que el dominio que de esta parte de la isla habían logrado durante
veintidós años, de ningún modo podían perderlo.
Por lo antes
dicho, los haitianos se van a su país, organizan su poderoso ejército y con
bélicas intenciones regresan a la proclamada República Dominicana, iniciándose
así las llamadas guerras de independencia.
Esas guerras,
la primera de las cuales fue la del 19 de marzo de 1844, duraron doce largos
años, es decir, no fue hasta el 24 de enero de 1856 cuando logramos quedar
libre del ataque haitiano con el estadillo de la célebre batalla de Sabana
Larga, última guerra sostenida entre haitianos y dominicanos y cuyo héroe fue
el general santiaguero Juan Luis Franco Bidó.
Cinco años
después de la última guerra de independencia, el 18 de marzo de 1861, al
presidente Pedro Santana se le ocurre anexar nuestra patria a España, pues
entendía que solo bajo la protección de una nación poderosa podíamos evitar que
el pueblo haitiano nos invadiera de nuevo.
El 2 de mayo de
1861 se produce en Moca la primera rebelión con las armas en las manos en
contra de la anexión a la España. José Contreras, Cayetano Germosén, José
Inocencio Reyes y José Mará Rodríguez se cuentan entre los protagonistas de
esta heroica gesta.
El 16 de agosto
de 1863 un grupo de catorce hombres bajo el mando de Santiago Rodríguez
decidieron, en el cerro de Capotillo (Dajabón) bajar la bandera española e izar
la dominicana, iniciándose así las llamadas guerras de Restauración. Estas
guerras duraron dos años (hasta 1865), las fuerzas nacionales resultaron
triunfantes y los últimos soldados españoles abandonaron el país en febrero de
1866.
FOTO : General Santiago Rodríguez
No hay comentarios:
Publicar un comentario